Aquí en gringolandia salen las aparentes noticias más raras cuando viene a política doméstica e internacional, pero esa ha sido siempre la realidad de la política gringa, abundancia de rancio dualismo, y hoy da la impresión que nadie sabe por seguro quien está manejando la política exterior de los gringos y no sólo cuando viene a Honduras, pero a nivel mundial también.
La semana pasada era evidente que la Secretaría de Estado que maneja Hilary Clinton tenía una agenda ultraderechista y pro neocons bien diferente de la Obama y algunos líderes liberales demócratas, especialmente tocante al problema hondureño.
Esta semana el turno es del vicepresidente Joseph Biden, de viaje en la República de Georgia, desde donde ha dado unos comentarios al vocero ultraderechista Wall Street Journal, denigrando a Rusia.
Pareciera que a Obama lo están ridiculizando aprovechando el tropiezo que está teniendo por pasar el seguro universal y el desliz que le pasó con sus comentarios sobre el policía blanco y el académico negro, esto aunado con dudosas encuestas que le bajan porcentaje de popularidad, todo empandillado para hacerlo parecer debilitado…, y sus subalternos parecen estar aprovechando para dar señales individualizadas tocante a la política exterior y doméstica gringa.
El mulato da la impresión de un jinete perdiendo el control del macho.
El caso del Vice Joseph Biden es el más raro porque denota querer continuar las políticas del aborrecido George Arbusto contra la política de su actual Presidente, o sea, el Vice llega a Georgia y les da la mismita paja que les dio Bush.
En general Biden dice que EE.UU los va a defender de Rusia, peor aún, dijo desde allí que "los problemas económicos de Rusia probablemente los obligarán a cooperar en un rango de asuntos de seguridad nacional con USA" O sea, parafraseando lo mismito que decía George Bush antes del colapso económico y la invasión rusa a Georgia, donde los gringos sólo se quedaron viendo.
Yo leo y me digo que tenemos un presidente gringo que llega hace dos semanas a Rusia y es todo sonrisas, promesas de cooperación, realza la amistad gringo-rusa, da maestría de elocuencia cuando habla del mutuo respeto.
Pero luego, más bien luegüito, dos semanas después, llega el Vice a la vecina Georgia, enemiga de Rusia, a decirles ficha vista que EE.UU los apoya, los protege y termina volándole verga a Rusia, a quien dos semanas antes el Presidente gringo dijo lo contrario.
¡Puta! hay dos agendas políticas, típica hipocresía político-diplomática que chivearía a cualquiera.
Lo más raro y sorprendente del volado que se cuece es el reaparecimiento de los neocons que han vuelto a salir del escondrijo donde se metieron luego que su modelo económico neoliberal casi colapsó.
Los neocons sionistas William kristol, Krauthammer, y Podhoretz todos aparecieron en las redes de noticieros televisivos todo el fin de semana opinando como "expertos" de el seguro universal de salud, la "alianza USA, Panamá, Colombia, México" contra ALBA de Chávez, por supuesto, sobre el golpe de estado hondureño.
Cuando estos tipos aparecen es porque algo se está cocinando en la política gringa.
Y pienso que la política gringa está amarrada inevitablemente a nuestra región y mi terruño.
El Salvador está en estos momentos en transición, pero quizás no la transición que los gringos quieren, pues aunque Mauricio Funes jure y perjure que su política no es anti gringa, la extrema derecha gringa, en oposición, pero con gran poder, no acepta estar entre camagüe y elote.
El Presidente Arbusto ya lo dijo por ellos hace ocho años: "O estás conmigo o contra mí".
Para la extrema derecha gringa liderada por gigantescas corporaciones y conglomerados financieros, en alianza con millonarios sionistas y los neocons, para ellos no se vale medias tintas, partiendo de aquí se centra un probable futuro conflicto… no me sorprendería si el próximo paso de la extrema derecha gringa es echarnos a darnos verga hermano contra hermano en Latinoamérica.
Tamen
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