Una vez le pregunté a mi papá que
él creía había después de la muerte: "Silencio, por eso hay mucha paz", fue su respuesta.
Dos años después, y un mes antes de su muerte,
viajé Houston-Chicago por una semana para estar con él. El cáncer había vuelto
su voz un susurro, pero habíamos acordado él nunca iba a decir el "ya me voy a
morir", como acostumbraba a expresar constantemente su cuñada, única hermana de
mi madre, fallecida de cáncer pulmonar un año antes.
Era el día de mi cumpleaños y
después de desayunar en su restaurante favorito en la Kimball y Lawrence Ave, y como hicimos toda la semana,
íbamos hacia el lakefront, le gustaba ver el skyline de Chicago
desde la orilla del lago Michigan…, pero en el camino al lago tuvimos que parar
y dejar pasar un funeral con carros adornados de flores…. Con mi oído cerca de
sus labios mi ruco inolvidable me dijo en susurro:
- No quiero que me lleves
flores…
- ¿Pero porqué papá?...
- No hay donde
sembrar… Mejor me traes un lapicero
porque hay mucho silencio… y mucho tiempo…
Y eso es lo que hago siempre que voy y lo visito en su sepulcro, le llevo un lapicero que lo entierro profundo
cerca de su lápida, para que no se lo hueveyen…
Y sin que se dé cuenta, le llevo flores
plásticas que también se hueveyan.
Mi ruco lleva 3 lustros de viajar
hacia su Cuadrante…, Y, para mí, sigue inolvidable, aún tengo fresco las conversaciones
sobre la familia, historia, política, geografía, moral, fút y baseball… Aún
guardo mucho cariño, amor y mucho respeto por él.
Donde sea se encuentra en el
Universo, Un abrazo a mi viejo… Y repito AGAIN AND AGAIN: Fue un gran tipo mi
viejo.
¡UN SALUDO EXTENSIVO A TODOS LOS
PADRES EN SU DÍA!
EL ASALTO
¡Todo el continente de tus padres fue!
¡Dominio virgen! ¡Fértiles entrañas! ¡Pródiga tierra!
¡Hunos! ¡Convictos y malhechores te invadieron!
Con pólvora, arcabuces y caballos,
en lucha cruenta y despiadada te vencieron
perdiendo todo lo que Dios te había dado.
Consolidada la acción, principia la emoción de la hazaña desalmada,
y con la espada empuñada ¡Era riqueza lo que buscaban!
Ante el sacro estandarte qué portaban, ¡todos se postraban!
y los que no lo hacían, en nombre de Dios,
¡eran partidos en dos tajadas!
Los feudálicos señores los sabaditos celebran...
invadían las pocilgas, y a las menores raptaban,
en el bacanal maldito, unas muertas quedaban
y otras volvieron... con fetos en sus entrañas…
Tamen
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