sábado, mayo 02, 2020

Canción y Versos Finsemaneros Para Una Inolvidable Amiga...


Allá por 1998, en los tiempos de America On Line, conocí una compatriota de los que entonces era raro encontrar en la diáspora… Inteligente, carismática, versátil y poetisa… Eran los tiempos que el internet sólo permitía letras, puño de letras, entonces era cuando el alma denotaba la personalidad, el verbo reflejaba el carácter y la poesía la sensibilidad… Me imagino era cuando los poetas surgieron en el siglo XIX… en AOL eran tiempos similares y por eso la poesía era bastante protagonista, y muchas veces eje de una amistad… Eso me sucedió con ella… Había una cofradía de salvadoreños que se llamaba Rincón Cuscatleco donde sábado a sábado nos reuníamos y "chateábamos" sobre nuestra tierra… era un rincón amenamente nostálgico, dinámico, con propósitos, donde guanacos de todo Estados Unidos convergíamos.... Allí la conocí y junto a otros dos salvadoreños que yo apodé "el triunvirato" iniciamos nuestro deseo por unir y formar una unidad de guanacos forjando la idea de ver cómo podíamos ayudar a nuestra tierra echando a la basura la ideología política… Ella laboraba en la rama de la jurisprudencia  y yo le llamaba con afecto paralawyer, porque me parecía que sin ser lawyer, sus conocimientos en jurisprudencia eran más y mejor que cualquier abogado de allá, aquí y acullá… Desde Nueva Jersey ella ayudó a muchos compatriotas sobre migración.

Pero sobre todo ella escribía versos inolvidables con el nombre seudónimo de Soylamar... Yo aún atesoro y leo su poemario que me obsequió.... Pero su nombre legal entonces era Reina I. Valenzuela.

¡Mis parabienes y cordial fraterno abrazo van hacía ella donde quiera esté!

Tenés mirada fresca y sonrisa sana,
y tus poros exhalan bravía energía;
tus manos versos de sublime poesía,
y tu nombre exalta la flor soberana…

Cuando llegaste te negamos amistad,
pues aún yo corcoveé tu aparición,
pero tus versos destilaban hermandad,
y tu poesía hacía sentir esa comunión…

Gozas del carácter noble y mente sana,
tu genial carisma engañan los sentidos,
así es tu forma de tratar como hermana
buscando la difícil convivencia unidos…

Con valor y con clase cuando un amor
es desconsuelo, enfrentaste la pasión
inmerecida producto de la asociación
ingrata, conocistes misterios del dolor
buscando tu destino,...y una ilusión...

Lo tuyo es natural, no alquimia y magia,
tu imagen, soberana mujer, se regocija
pensando en la bandera azul que cobija
el sueño de unidad que grita y presagia…

Quizás sería mucho acaso si te conociera
sintiéndome entre tu risa y camaradería,
si un sentimiento generara..., yo quisiera
                    se recordase como una bella... ¡Fantasía!

Tamen
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