Hola Papá. Mi viejo, como hoy yo le llamo a usted…, y que, por supuesto,
si usted aún existiera en la nave espacial, jamás lo llamaría así.
Cada vez que hurgo en mis sarcófagos neuronales, siempre me doy cuenta salta
casi al instante un primitivo recuerdo de escasos 3-5 segundos que sobresale
como el olor de mi tierra en el aeropuerto Monseñor Romero llegando después de años ausente…
Comienza el filme neuronal con un close
up de una blanca bacinica y su clásica orilla azul… Sigue usted, de traje entero, lo veo al mirar hacia arriba, como
si usted fuera gigante, viéndolo dar un beso en los labios de mi madre, yo le
doy una patada en la chimpinilla…, usted ve hacia abajo y me mira como Zeus olímpico
miraba a los griegos, usted sonríe, con un destello de orgullo, me toca acariciando
mi cabeza, con rabia quito su mano…, le da otro beso a mi mamá, otro puntapié a la chimpinilla, y los dos se
ríen…. Ese fue el primer indicio que sugería yo heredé sus genes.
Allí descubrí yo era tan patológicamente celoso…. Como fue usted con
mi madre.
Me siento alegre porque estoy seguro usted se halla donde siempre me
dijo estaría: La nada…, conocida como muerte, pero, como me dijo también usted, "está más llena de vida que la misma vida".
Están grabadas esas palabras papá. Recuerde abril 2005, dos años antes
de su viaje a "la nada", con su permiso pasamos dos horas grabando sus ya
escasos y empañados recuerdos de sus 91 años de existencia… Dejémoslo hoy hasta
allí.
La nueva es que vivo en el terruño en medio de cerros, volcanes, lagos y
lagunitas, aves cantoras, chocitas, chozas y chozonas, con toda clase de
insectos, con toda clase de cuadrúpedos, algunos más civilizados que los bípedos
terrícolas. Tengo de regreso sus palomas grises alas orilla blanca y muchos sanates, tordos, talapos y torogoces… y sobretodo un hermoso clima.
Ya cumplí 66 años y también como usted, entre varios achaques suyos,
padezco malestares estomacales nocturnos, y como usted, también tomo Sal De
Uvas Picot, su bala mágica también hace magia conmigo.
No me va a creer pero aquellos sobres que valían dos por dos reales, que
antaño casi cada día me mandaba a la tienda a comprar y que cualquier vendedor
ambulante cargando la colgante cajita de madera vendía mejorales, penicilinas,
fungicidas, antiparasitarios, purgante, sinsueño, Alka Seltzer, dulces de limón,
Mentas y Salvavidas, cigarros, churros…, ¡y sal de uvas Picot!…, pues ya no lo
vende nadie en el terruño. Sí, ya sé, ¡es una infamia!, pero todo cambia, ¿se acuerda?
Y si le pone sal a la herida pues muy poca gente aún sabe qué es ese volado
llamado Sal de Uvas Picot... ¡Qué horror!
Tuve que traerme un quintal de gringolandia para
abastecerme. USA se quedó en las cavernas porque las sales de uva Picot se
venden en Waltmart, Walgreen, CVS, Target…, y en casi todas las farmacias en todo
gringolandia... ¡Qué cavernícolas!
Como usted, dos diminutos lipomas anidan debajo de mi piel en mi brazo
derecho. Son el número 3 y 4, ya casi empato los 5 que usted padeció, pero
quizás nunca podré igualar el de casi media libra de peso que le sacaron en
Chicago… O quién sabe.
Gracias quizás a usted aún no tengo diabetes, ni presión alta, ni
colesterol alto… bueno, como aquel refrán que a usted le gustaba tanto, yo vivo "a Dios rogando, pero con el mazo dando", hago ejercicios, y sigo como me dejó:
sin fumar ni beber… E igual a usted siempre queriendo y viviendo con la misma
mujer que casé hace casi 41 años.
Como ve no se puede zafar negando es mi padre biológico porque de tal
cuero, las culebras.
La única negatividad se inició debido a su fallecimiento cuando surgió
un cisma familiar que me niego superar… quizás es debido a la sangre india en
mis venas que usted me dijo es tan terca y caituda.
Como le prometí, sin falta cada vez que llego al nicho donde reposa su
resaca de átomos, yo le llevo y entierro a su lado el lapicero que me pidió. Espero
que en su Cuadrante ya vaya bien encaminado escribiendo sus "memorias de 20
tomos y 20 mil páginas" que me dijo se proponía escribir, cuando yo llegue
donde usted, si Mi Señor de los Cuadrantes lo decide así… lo leeré todo mil
veces…
Me va perdonar por llevarle flores, usted me lo prohibió, pero, ¿llegar
sin nada?, paliando un poco déjeme decirle que son flores plásticas que duran
tan sólo dos o tres días, o quizás horas porque se las hueveyan o los dueños
del camposanto las botan rapidol.
Tengo dos aguacates, un marañón, un almendro, un limón, dos naranjos, 3
cipreses, 6 cinco negritas, rosas amarillas, rojas, blancas, rosadas, ocre, un
clavel amarillo, un rojo y un ocre, begonias, lavanda…, más un trillón de
hormigas y medio quintal de gamezán, a la par, en un lote sin construir, recién
se mudó la familia conejo que de noche se meten en mi propiedad a comer zacate,
aún no abren hoyos… En fin si a usted le gustó aquel backyard que quedó atrás en Houston, le hubiera gustado más aquí… A
mi me encula papá, pero hay un tumba nota: No se siente el inspirante olor a caca
de buey.
Aún no he podido conseguir la mirra que le prometí sembraría en su honor.
En Houston le sembré un aguacate en vez, pero salió canelón, en 12 años no dio
fruto, aquí no le daré chabela, aunque esta pandemia no me ha permitido
talonear su mirra aún.
Llevamos 10 meses viviendo en Juayúa pero hemos pasado casi cuatro meses
encerrados y yo pasé casi un mes enfermo de adaptación antes de la pandemia. En
cuanto este volado del virus pase iré a talonear la mirra que hace dos milenios
tres persas dicen le obsequiaron al Rey.
Pues de política no quiero ahondar mucho papá, las cosas, mundialmente
no andan muy bien.
¿Recuerda cómo en 2005 me regañaba por mi "obsesión" acerca del racismo
en E.E.U.U.?
No creería si viera lo que pasa en ese país que hizo tambalear sus
sentimientos patrioteros. Llegó de líder un demagogo pajero con trastorno de personalidad
y hoy la nave espacial está como si Maquiavelo o George Orwell hubieran viajado
a este tiempo y sobre ello escribieran sus
famosos libros.
Honradamente no siento dolor por su ausencia papá, sino alegría sabiendo
que ya no está en medio del despelote en que nos hallamos en el blue dot que quizás usted ve desde su
estancia. Usted hoy va al manchón de penal y sale apuñalado, demonizado,
condenado, huyendo…
¡Mejor quédese donde está, papá!
Me traje y guardo sus estampillas, ya nadie compra esos volados papá, al
menos eso me han dicho; eso sí, las tengo bien guardadas, lo mismo sus monedas…
y sus libros que a mi entretienen.
Y también aún guardo su poesía…
Su poesía me vuelve a recordar y recalcar yo soy su hijo, no hay
lechero, panadero u ordenanza. Uno más de los cinco "joyayán puto" sobreviviente,
pero más separados que los planetas.
Pase, donde sea esté, un feliz día del padre y recuerde que todavía
existe un hijo suyo que, mientras viva en esta nave espacial, siempre lo venerará
y recordará.
¡Hasta Pronto!
Es necio aquel
que cree solo orando,
implorando o
rezando
es el único
medio para alcanzarte…
O que solo adorarte,
loarte o doblegarse te satisface.
Es farsante y pérfido
aquel que acusa de blasfemia
al solo hecho
de no buscarte en áureos altares,
templos suntuosos, o
pomposas edificaciones…
A pesar de
todo, no los culpo,
porque fuiste, Sos y eternamente serás
Aquel que nos
dio libertad al viento.
Quien nos hizo
evolucionar diferente
entre todos
los seres vivientes,
Sos Juez
Supremo e inapelable….
No hay condena
por pensar
o actuar
diferente,
no hay
infierno,
no hay pecado,
solo hay
errores,
horrores,
acciones,
defectos,
resultados,
consecuencias,
que como Juez
ponderas
sin condenar,
observas
sin castigar…
El castigo es enfermedad
auto-inmune
es auto-infligido,
gracias a tu
libre albedrío,
Tu viento de
libertad,
es Tu gloria
misericordiosa,
porque Sos compasivo
testigo que posee mi alma
y nunca Serás
mi sanguinario Juez
porque yo soy
mi propio verdugo…
Mi savia es
tuya, mi energía es tuya, mi carne es tuya,
pero mi mente
y mi cerebro me lo diste emancipado,
libre es mi
letra, libre mi verbo, libre mi epístola,
libres como el
viento…
Y con esta
libertad…
¡He logrado
encontrarte!
.
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